Día tras día, casi todos desperdiciamos una buena cantidad de comida. Las sobras se tiran a la basura, y también comemos más de lo que nuestros estómagos pueden contener. No tenemos en cuenta lo valiosos que son los alimentos que consumimos. Pero para las personas sin hogar que buscan comida por las calles, cada bocado cuenta. Incluso una pequeña porción puede hacer una gran diferencia en su día a día.
A una persona hambrienta ni siquiera le importa si el alimento está a punto de dañarse, y es casi seguro que no le importará que esté frío. Simplemente, las personas sin hogar se alegran de poder encontrar una comida. Es cierto que muchos de nosotros sobrevivimos de salario en salario, pero sin duda, sobrevivir de bocado en bocado es mucho peor.
Ashish Sood, un joven de 33 años que vive y trabaja en Brisbane, Australia, sabe muy bien que la vida en las calles es muy peligrosa. Ashish llegó a Australia en 2007 con una visa de estudiante, y tenía el sueño de abrir su propio restaurante. Pero durante dos semanas, Sood se vio obligado a vivir en la calle. Aunque eso no fue nada si lo comparamos con las personas sin hogar que han vivido en la calle durante años, él nunca ha olvidado lo terrible y aterradora que fue esa experiencia.
A raíz de su experiencia, se empeñó en ayudar a las personas que se encuentran en situación de calle. Ya han pasado más de 10 años desde que Sood hizo realidad su sueño, logrando abrir su propio restaurante de comida india. Gracias a su esfuerzo, los habitantes de Brisbane pueden disfrutar como nunca los intensos sabores del jengibre y el ajo.
Need food? Just knock! Indian take-away in Brisbane feeds the homeless | SBS Your Language sbs.com.au/yourlanguage/p
Para poder aprovechar las sobras de comida que le quedaban todas las noches, a Ashish se le ocurrió una idea. En vez de correr de su negocio a los menos afortunados, este maravilloso hombre les abre las puertas. Pone un cartel en la ventana, invitando a las personas sin hogar a comer gratis todos los días después de las 10:30 de la noche de lunes a sábado, y después de las 8:30 pm los domingos.
Sood dice que regularmente alimenta a unas ocho o nueve personas. Pero está contento de tener tantos comensales como sea posible. Dice que si tiene la oportunidad de alimentar a más personas sin hogar, lo hará. Todos sus clientes lo apoyan y lo animan a seguir ayudando de esta manera.
Sood dice que gracias a sus esfuerzos, siempre está construyendo relaciones con la gente de su comunidad. Sara Harrup, una directora ejecutiva de Brisbane, dice que apoya plenamente los esfuerzos de Sood. Señala que muchas de las personas sin hogar son despreciadas y tenidas como criminales y drogadictos, lo cual no es cierto. Están agradecidos de que alguien se preocupe lo suficiente por ellos, brindándoles una comida caliente y un lugar donde sentarse.
Ojalá hubiera más gente como Sood en este mundo. ¿Conoces a alguien que ayude a los sin techo? ¡Cuéntanos en los comentarios! Si te gustó este artículo, por favor compártelo con otras personas.